Inversión en la ciudad y creación de empleo

Esta semana la empezamos pendientes del decreto del Gobierno sobre el plan del presidente Zapatero, que destinará 8.000 millones a obras públicas gestionadas por los ayuntamientos. El decreto detallará entre otras cosas las condiciones para acceder a estos fondos, aunque sabemos que la población será un baremo fundamental.

Nosotros este sábado pasado ya nos hemos puesto a trabajar, para concretar tres cosas importantes que nos permitirán acogernos al plan: en primer lugar, determinar la composición por oficios, edad y sexo del paro en la ciudad. En segundo término, cómo se podría gestionar una situación de excepcionalidad como ésta, que además deberá llevarse en paralelo a la gestión ordinaria. Y finalmente, como es obvio, qué proyectos son los que se pueden ajustar mejor a las condiciones del plan, en cuanto a inversión, planificación o repercusión final en lo que respecta a la creación de empleo y a atender las necesidades de la ciudad. En los próximos días concretaremos todas las opciones de que disponemos, ya que no hay tiempo que perder. De todas formas, hasta no disponer del texto concreto del decreto no estaremos en condiciones de determinar el alcance de esta medida, que sin duda beneficiara a la ciudad, bien sea en la construcción de nuevos equipamientos, mejora de espacios públicos o reforma de infraestructuras siguiendo la línea clara de trabajo que decidimos al principio del mandato.

Como ya apunté el viernes, el plan aportará finalmente una cantidad superior a la que estábamos pidiendo los municipios por el tema de financiación. En las circunstancias actuales, que están fuera de lo común, debemos contar con las iniciativas de los poderes públicos para dinamizar la economía. Y esta iniciativa es muy importante, porque aunque su gestión sea compleja, tiene un gran potencial para lo que más nos interesa: inversión en la ciudad y crear empleo.