Hablar de paz significa un paso adelante

Que ETA hable de "alto el fuego permanente" quizá no nos alumbre el final del camino, pero al menos, nos muestra que ese camino está abierto y que debemos intentar recorrerlo.
Estaban en un callejón sin salida, y por una vez, parece que los terroristas han razonado y muestran indicios de que piensan abandonar las armas. Como ha dicho el presidente Rodríguez Zapatero, tenemos que acoger esas palabras con suma cautela, por venir de quién vienen, pero también, inevitablemente, con esperanza. Un inciso para decir que sobre todo, quiero felicitar al presidente por su determinación y honestidad en el empeño de acabar con el terrorismo, que sin duda ha conducido a este "principio" de conclusión, y sobre todo por hacerlo a la luz y con taquígrafos, en el Congreso de los Diputados. Siguiendo las indicaciones del Congreso, ahora vemos que el final es posible; por supuesto que sería mejor que ETA anunciara que deja las armas incondicionalmente, pero también por supuesto, no es realista esperar una decisión así.
Este país necesita pasar página a ETA, y el País Vasco necesita que todos sus ciudadanos y ciudadanas vivan tranquilos, en confianza con sus vecinos, sin esa oscura intimidación y coacción que generaba la banda armada.
Cornellà se ha movilizado durante muchos años contra la violencia de ETA. Muchas veces nos hemos concentrado ante la puerta del Ayuntamiento para mostrar nuestro rechazo, condena, y reafirmación de nuestras convicciones democráticas, y no lo vamos a olvidar ahora. Pero sé que nuestra ciudad también apuesta por la paz, y que comparte la esperanza y la prudencia con la gran mayoría de ciudadanos y ciudadanas de este país.