17 de març 2006

Aquellas pequeñas cosas...

Cada martes niños y niñas de escuelas de la ciudad visitan nuestro ayuntamiento y les explico qué es esto de la administración municipal. Es un encuentro agradable, un momento de la semana distendido y espontáneo, en el que los más jóvenes, aunque al principio están expectantes, poco a poco dan rienda suelta a sus inquietudes. Curiosamente, uno de los últimos grupos, en concreto el 3ero B del Ceip Ignasi Iglesias, me entregaron un dossier que contenía dibujos en el que representan cómo quieren que sea su alcalde, me produjo una inmensa alegría y después charlamos un poco. Con sus preguntas “surfean” sobre muchas cosas cotidianas y muestran una gran curiosidad sobre la vida municipal. Por eso algunas veces, les explico lo que representa las pequeñas cosas, como dice Serrat, “Son aquellas pequeñas cosas, que nos dejó un tiempo de rosas en un rincón, en un papel o en un cajón...” son con ellas y con ellos las que hacen la ciudad día a día.

Es también un momento que me permite reflexionar y compartir aficiones por la lectura, interesarme por el afecto que tienen a la escuela, y en cada guiño que me lanzan, me reafirma que la educación es fundamental para crear ciudadanos y ciudadanas libres y con criterio propio. Por ello creo que vale la pena que todos y todas hagamos un esfuerzo común para fomentar en nuestros jóvenes valores como la solidaridad o el respeto. Tal como canta José Antonio Labordeta, “Vamos a hacer con el futuro un canto a la esperanza y poder encontrar tiempos cubiertos con las manos, los rostros y los labios que sueñan libertad”, porque los jóvenes son nuestro futuro y nuestra esperanza.

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