Maleït sorteig

En un momento económicamente complicado, y en una ciudad como Cornellà donde la situación de la mayoría de familias obliga a trabajar a dos personas para poder llevar adelante un proyecto de futuro equilibrado, es imprescindible realizar una oferta de servicios destinada a la educación de los niños entre 0 y 3 años, teniendo en cuenta que jamás podrás satisfacer toda la demanda real.
El esfuerzo presupuestario que se ha realizado en estos últimos años, ha supuesto triplicar las plazas en las escuelas de educación infantil municipales.
Desde 2006 se han puesto en marcha nuevos centros municipales en Almeda, en Fontsanta-Fatjó, y este septiembre en Pedró, y existe otro más proyectado en Sant Ildefons: en total tendremos una oferta aproximadamente de unas 625 plazas.

Precisamente porque es una de nuestras principales preocupaciones, y conocemos la sensibilidad que despierta el poder acceder a este servicio, tenemos que admitir los errores que este año se han cometido en el sorteo de asignación de plazas.
El sorteo contenía un error matemático que imposibilitaba a quince familias de trescientas ochenta el poder entrar en el sorteo del grupo de puntuación del tramo de 90 puntos. Error que en años anteriores algunas personas nos habían anunciado pero que técnicamente se desestimó.
El día 2 de junio se realizó el sorteo público, con presencia de familias interesadas. Éste dio paso a unas listas provisionales, pero este año, ante nuevas alegaciones, los actuales responsables consideraron que se tenían que estimar. Desde el momento de realizarse el sorteo, las familias ya conocían el resultado, pero a la vez tres de estas quince familias reclamaban corregir la situación al no haber podido entrar en el sorteo.

Ante ello, teníamos que hallar una solución. Cualquiera de ellas era complicada, una vez llegados al punto donde estábamos, y realmente tengo que decir que desde el ámbito político hemos sido erráticos en la toma de decisiones.
Al final, se decidió respetar los resultados del primer sorteo, con las plazas asignadas en primera instancia. Y en segundo término, se ha incorporado al resto del grupo de familias que contaban con 90 puntos en la valoración inicial para proceder a un segundo sorteo y asignar 19 plazas.
Lamento lo que ha ocurrido. No hay excusas. Algunas veces se producen situaciones incomprensibles y encontrar una solución que sea satisfactoria para todos es imposible, no se puede reparar el error a gusto de todos porque no hay marcha atrás, sólo queda la responsabilidad de tomar una decisión para subsanarlo.

Ciertamente peor no se podía haber hecho. Cambiaremos el sistema para evitar este tipo de situaciones.
Com em va escriure una ciutadana afectada: "Maleït sorteig".