Compartimos mucho más que el Mediterráneo

Esta semana hemos aprobado en la Junta de Gobierno Local un documento de apoyo a la candidatura de la ciudad de Barcelona como sede de la Secretaría del "Proceso de Barcelona: Unión para el Mediterráneo".
Este proyecto, cuyo embrión está en el llamado "Proceso de Barcelona" de 1995, tiene una vigencia extraordinaria hoy en día. Hemos destinado grandes esfuerzos a la integración europea, pero nuestra realidad es la que es. Si el mundo se globaliza y las distancias se acortan, qué decir de los países y las personas con los que compartimos la cuenca mediterránea. Una Europa unidad conlleva retos, ventajas y también problemas comunes, y en muchos de ellos necesitamos colaborar con nuestros vecinos.
Se trata de una iniciativa muy ambiciosa, que para consolidarse tendrá que aportar solvencia y eficacia. La candidatura de Barcelona es la mejor, sin duda, porque esta ciudad, como todos nosotros, ha representado mejor que ninguna otra su carácter mediterráneo y a la vez su vocación de puerta a Europa.
Este proceso debe dar un impulso renovado y estable a las relaciones políticas, sociales y económicas en la región euromediterránea, de la cuál somos parte activa e implicada. La idea es muy buena, pero requiere un largo recorrido y voluntad de todas las partes. Tener su sede junto a nosotros sería mucho más que un honor, será una oportunidad para aportar solidez, experiencia y una visión realmente constructiva de las relaciones entre comunidades y entre países.